Cómo Filtrar a Posibles Inquilinos

15 de Abril 2021 /Artículos / Por Alex Díaz

Parte 1 - Pedir una solicitud

1 Pre-selecciona antes de entregar la solicitud.

Antes siquiera de entregar la solicitud o invitar a personas a ver el lugar que vayas a alquilar, realiza una preselección por teléfono.

Esta es una forma fácil de eliminar a personas para las que la propiedad simplemente no sea la adecuada por cualquier razón. Preseleccionar ahorrará tiempo y dinero tanto a ti como a los solicitantes, ya que no tendrás que molestarte en realizar verificaciones de crédito y antecedentes.

  • Pregunta por adelantado para asegurarte de que cumplan con todas tus calificaciones básicas con respecto a mascotas, fumadores, etc. Por ejemplo, si para ti ser fumador sería un motivo para romper el acuerdo, no esperes a que la persona vaya a ver la propiedad para averiguarlo.

 

  • Responde sus preguntas para ver si también son las personas adecuadas. Invita a los solicitantes a hacerte preguntas sobre la propiedad y el vecindario y responde con honestidad.

2 Pide a los solicitantes serios que llenen una solicitud.

Puedes diseñar tu propia solicitud o descargar una estándar e imprimirla para los solicitantes. El propósito más importante de una solicitud de alquiler es obtener información que te diga si el posible inquilino tiene un trabajo y finanzas estables para que puedas estar razonablemente seguro de que podrá pagar la renta a tiempo.

Haz las siguientes preguntas en la solicitud:

  • Pide el nombre, fecha de nacimiento, dirección y número de seguridad social (si aplica) de la persona que figurará en el contrato. Necesitas esta información para poder llevar a cabo una verificación de crédito y antecedentes.

 

  • Pregunta sobre el historial de trabajo y el empleo actual del solicitante. Obtén información detallada sobre dónde trabaja y cuánto tiempo ha trabajado allí.

 

  • Pregunta sobre su ingreso actual. El ingreso mensual del solicitante debería ser por lo menos tres veces mayor que la renta mensual.

3 Pide referencias.

Ya sea en la misma solicitud o usando un formulario aparte, es importante que las solicitudes proporcionen información sobre los caseros anteriores, así como referencias de empleo y personales.

Las referencias deben pintar un retrato claro del historial del solicitante como inquilino, empleado y vecino. Independientemente de qué tan bien se constate en otras áreas, si una de las referencias de tu posible inquilino no recomienda que le alquiles la propiedad, es probable que debas hacerle caso.

  • Pide los nombres y números telefónicos de tres o más referencias. Especifica que quieres hablar con el último casero que el solicitante haya tenido, así como con su empleador.

 

  • También puedes pedir al solicitante que especifique por qué se fue de sus residencias anteriores y cómo quedaron las cosas con sus caseros anteriores.

4 Pide información de su estilo de vida.

Trata de averiguar a qué tipo de situación te estarás metiendo al alquilarle la propiedad a cada persona en particular. Las cosas fluirán mejor si eliges a alguien que encaje bien con la vibra del edificio.

Por ejemplo, si eres dueño de un edificio de departamentos y tus otros inquilinos son en su mayoría personas de la tercera edad, es posible que tengas algunos problemas si alquilas un departamento a los miembros de una banda de rock que quieran ensayar en el departamento.

  • Solicita conocer a las personas que vivirán en el departamento, incluyendo los niños.

 

  • Averigua si tienen mascotas y de qué tamaño son. Tienes el derecho de rechazar a un posible inquilino o cobrar un depósito de garantía más alto debido a las mascotas.

5 No hagas preguntas discriminatorias.

Existen leyes que prohíben a los caseros rechazar inquilinos en base a ciertas cualidades. Asegúrate de que tu solicitud no tenga preguntas que podrían interpretarse como discriminatorias, y tampoco hagas este tipo de preguntas en persona. Si lo haces, podrías ser objeto de una demanda.

  • En general, no está permitido discriminar en base a la raza, religión, nacionalidad, género, edad, situación familiar y discapacidad física o mental.

 

  • En algunos lugares, tampoco está permitido discriminar en base al estado civil u orientación sexual.

6 Revisa la solicitud antes de proceder.

La solicitud es un paso importante en el proceso de verificación, y eliminarás a muchas personas en esta etapa. Lee las solicitudes cuidadosamente para ver si hay alguna señal de alarma antes de profundizar más en el proceso de verificación. Si encuentras algunos posibles inquilinos que se constaten bien, puedes pasar a llevar a cabo las verificaciones de crédito y antecedentes.

  • Asegúrate de que el nivel de ingreso y situación laboral sean suficientes. Si te preocupa que el solicitante pueda tener problemas para cumplir con la renta, tal vez no valga la pena el riesgo.

 

  • Asegúrate de que la información sobre el estilo de vida

 

  • corresponda con lo que quieres. No te metas en la situación de alquilar la propiedad a alguien con tres gatos y tres perros a menos que estés realmente preparado para lo que esto conllevará.

 

  • Busca espacios en blanco en donde se haya omitido información. Si no contestaron una determinada pregunta, eso podría ser una señal de alarma. Por ejemplo, si proporcionaron solo dos referencias y pediste tres, averigua por qué.

Parte 2 - Llevar a cabo verificaciones de crédito, antecedentes y referencias

1 Lleva a cabo una verificación de crédito

Elige las solicitudes que se constataron bien y lleva a cabo verificaciones de crédito de los solicitantes para determinar si tienen un crédito sólido.

En algunos lugares, serás responsable por el costo, pero en otros puedes cobrárselo al inquilino. El costo por verificación de crédito puede llegar hasta $25 o $50 dependiendo del lugar.

  • Evalúa la historia crediticia del solicitante. Averigua si hay antecedentes de pagos tardíos. Si ves alguna información que te preocupe, pregúntale al solicitante qué sucedió.

 

  • Revisa si el solicitante tiene deudas. Puede ser riesgoso alquilarle a alguien que esté muy endeudado. Sin embargo, si los registros demuestran que él o ella ha estado haciendo pagos mensuales consistentemente para liquidar la deuda, tal vez no debas reprochárselo.

2 Realiza una verificación de antecedentes

Contrata a una agencia para encontrar información sobre los antecedentes criminales y de desalojo del solicitante. Realiza una búsqueda en línea para encontrar agencias de confianza y encontrarás docenas de resultados.

Si bien no todos los caseros realizan verificaciones de antecedentes, ya que pueden ser costosas, una verificación de antecedentes puede proporcionar bastante información que afectará tu decisión.

Cuando estás a punto de entrar en un contrato de alquiler que podría durar un año o más, vale la pena el costo relativamente pequeño de asegurarte de que vayas a alquilarle a alguien en quien puedas confiar.

  • Revisa si el solicitante ha sido desalojado. Si es así, necesitas averiguar por qué y ser cauteloso en cuanto a alquilarle la propiedad hasta que hayas recibido una explicación. Si el solicitante fue desalojado por no pagar la renta, es probable que debas rechazarlo.

 

  • Revisa si el solicitante tiene antecedentes penales. Depende de ti determinar hasta dónde te sientes cómodo en esta área.

 

  • Revisa si el solicitante tiene registros públicos que indiquen si tuvo alguna demanda. Si lo demandó un casero anterior por razones que tenían que ver con problemas financieros, es probable que no debas alquilarle la propiedad.

3 Llama a las referencias del solicitante

Este paso es casi tan importante como las verificaciones de crédito y antecedentes. Hablar con otras personas que hayan alquilado una propiedad al solicitante en cuestión o hayan trabajado con él o ella te dará una mejor imagen de su personalidad.

Llama a cada referencia y pregunta sobre los antecedentes del solicitante como inquilino. Estas son algunas buenas preguntas que puedes hacer:

  • Pregunta si el solicitante pagaba la renta a tiempo cada mes.
  • Pregunta si hubo algún problema y, si así fue, cómo se resolvió.
  • Pregunta si la persona recomendaría al inquilino.
  • Si nadie contesta, considéralo como una señal de alarma. Sigue intentándolo hasta que te comuniques con la persona.
 
 
 
 
 

Parte 3 - Entrevistar al posible inquilino

1 Invita al solicitante a una visita detallada y una entrevista.

Una vez que el solicitante haya pasado todas las demás verificaciones, es momento de tomar la decisión. Tener una conversación más larga con el solicitante y mostrarle la propiedad que vayas a alquilar te brindará las últimas piezas de información que necesitas para sentirte seguro acerca de tu elección final.

  • Puedes hacerle saber al solicitante que vas a entrevistarlo, o puedes simplemente invitarlo a la propiedad a sabiendas que es para una visita detallada. La interacción podría ser más reveladora si el solicitante no se siente puesto en la mira.

 

  • Pídele que traiga boletas de pago para que puedas verificar su historial de trabajo. Él o ella también puede traer un cheque por la suma del depósito, en caso de que ambos quieran cerrar el trato de inmediato.

2 Haz preguntas que te ayuden a conocer mejor al solicitante

Teniendo en mente que ciertas preguntas están prohibidas, inicia una conversación que te ayude a entender el punto de vista del solicitante. Averigua por qué quiere mudarse, cuánto tiempo piensa quedarse y cualquier otra cosa que quieras saber.

  • Aprovecha la oportunidad para preguntar sobre cualquier señal de alarma que haya surgido durante el proceso de solicitud. Por ejemplo, si una de sus referencias no contestó el teléfono, pregunta si hay otra forma de contactarla.

 

  • Debes estar preparado para responder preguntas también. Recuerda que el posible inquilino también tiene que sentirse cómodo y confiado antes de decidir comprometerse con un contrato.

3 Averigua si hay una buena combinación de personalidades

Al hablar con el solicitante, trata de obtener una percepción de su personalidad y decidir si puedes concebir que una relación de negocios a largo plazo funcionará bien. Es bueno alquilar una propiedad a inquilinos que sean responsables y puntuales.

Ten en mente lo siguiente cuando hablen:

  • ¿El solicitante fue puntual o llegó tarde?
  • ¿El solicitante se vistió con esmero o vino con ropa descuidada? Esto puede decirte algo sobre cómo él o ella cuidará la propiedad.
  • ¿Él o ella ya tiene quejas sobre el lugar? Es mejor alquilárselo a alguien a quien realmente le guste la propiedad.
  • Establece las reglas básicas y evalúa su reacción. Si sientes que se pone defensivo o percibes otros problemas de actitud, piensa dos veces antes de alquilarle la propiedad.

4 Compáralo y contrástalo con otros solicitantes antes de tomar la decisión

Después de entrevistar a varias personas, es momento de tomar la decisión. Recuerda que, en la mayoría de casos, no tienes que ser gran amigo de la persona a la que le vayas a alquilar la propiedad. Con tal de que pague la renta a tiempo y cuide muy bien de la propiedad, no importa cuánto tengan en común.

  • Recuerda ser consistente y darle a cada solicitante la misma oportunidad. Las leyes sobre la imparcialidad especifican que, en la ausencia de señales de alarma, debes darle a cada solicitante que llene una solicitud la misma oportunidad de obtener el departamento.

 

  • Cuando hayas tomado la decisión, asegúrate de tomarte el tiempo de redactar un contrato que te proteja. Si bien siempre es útil someter a los inquilinos a un proceso riguroso de verificación, no siempre puedes predecir cómo terminarán las cosas. Un buen contrato de alquiler es uno en el que puedas apoyarte en caso de que al final tengas que desalojar al inquilino.

CONSEJO RENTA EMPRENDEDOR: 

No seas tan exigente como para terminar sintiéndote incapaz de elegir un inquilino. Confía en el proceso de verificación para ayudarte a encontrar a alguien que terminará encajando bien.

 
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