El turismo era, hasta hace poco más de un año, uno de los sectores económicos más potentes del mundo, con crecimientos por encima de la economía global y que daba más de 300 millones de puestos de trabajo. 1 de cada 11 trabajos en el mundo se dedicaban al turismo.
11 de febrero 2021 /Artículos / por Alex Díaz
El turismo era, hasta hace poco más de un año, uno de los sectores económicos más potentes del mundo, con crecimientos por encima de la economía global y que daba más de 300 millones de puestos de trabajo. 1 de cada 11 trabajos en el mundo se dedicaban al turismo.
Pero llegó la pandemia por Covid-19 y el sector se ha hundido.
El turismo ha sido una de las industrias más golpeadas por la pandemia. La llegada de turistas internacionales se ha reducido un 75% a nivel mundial (volviendo a números de turistas de los años 90) y se han perdido unos 170 millones de puestos de trabajo. Una catástrofe sin precedentes.
Esta situación va a forzar a destinos, empresas y profesionales del sector turístico a replantearse su posicionamiento en el mercado y reinventarse.
El sector turístico a nivel mundial está en hibernación, pero volverá con fuerza ya que viajar es una actividad esencial en la vida de la mayoría de las personas.
Pero no será como lo dejamos en 2019, será un sector turístico mucho más pequeño y competitivo.
Para aquellos que trabajan en la industria turística debe ser una prioridad el aprovechar este tiempo de baja actividad, para mejorar sus habilidades y competencias laborales.
Ya sea para buscar un trabajo que se ha perdido, mantenerse en el que aún se conserva o avanzar en la carrera profesional.
Antes de esta pandemia, ya estaba claro que los profesionales del sector turístico tenían que estar actualizándose de forma constante (debido a tecnologías disruptivas, nuevos modelos de negocio o cambios en las motivaciones de los turistas), e integrar la formación como un elemento básico a lo largo de toda su vida laboral.
La pandemia no ha hecho más que reforzar la necesidad de los profesionales en mejorar sus competencias laborales (hard skills en inglés), para destacar en un sector turístico mucho más competitivo.
La especialización cada vez es más importante y hay que estar al día de la evolución del sector y de las necesidades de los turistas (que evolucionan de forma constante y más con la Covid-19). La pandemia, por otra parte, también ha acelerado la transformación digital de las empresas y los trabajadores tienen que estar a la altura.
El reciclaje en digitalización es fundamental para potenciar la empleabilidad de los profesionales en activo – Digital workers.
Los perfiles profesionales más demandados en el sector turístico en los próximos años serán los perfiles digitales y aquellos enfocados al cliente.
Las competencias más demandadas son:
Los profesionales del sector también tienen que desarrollar las denominadas competencias suaves (denominadas soft skills) tan importantes como las competencias laborales y básicas para el éxito de cualquier profesional en una industria tan social como es el turismo.
Principales habilidades blandas necesarias en Turismo:
Las principales tecnologías que pueden impactar en el mercado laboral turístico son:
Los destinos y las empresas turísticas tienen que apoyar este proceso de mejora de las competencias laborales de los profesionales del sector.
Deben analizar las carencias y las limitaciones en competencias que existen dentro de su ecosistema turístico local (sea el destino o la empresa) y ofrecer un programa de formación continua que ayude a mejorar el posicionamiento de toda la cadena de valor.
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